Aficionado a la fotografía casi desde que tengo recuerdos.
Por su capacidad para liberar esa creatividad que todos, en mayor o menor medida,llevamos dentro y
lograrlo además de una forma tan
accesible y a la vez tan diversa. Una ventana abierta para
admirar el mundo, su luz,su colorido, sus gentes.
Estas fotos están realizadas con otro de mis objetivos preferidos. El Nikkor 50 1.8. No se puede conseguir más por tan poco. Lo mínimo en peso, tamaño y consistencia,que sin embargo consigue unas imágenes limpias y de gran belleza a poco que se intente.
Hay objetivos que, independientemente de lo que digan los análisis técnicos a los que se sometan, cuando los pones delante de una cámara y disparas con ellos, transmiten desde el primer momento algo especial, te hacen sentir cómodo, seguro y agradecido por que siempre engrandecen todas las fotos. Estas fotos estan realizadas con uno de ellos, el tokina 11-16.